Comienza la excursión que será de unas cuatro o cinco horas. Los primeros recorridos por amplia senda forestal. Luego se aparece a nuestros ojos la laguna de Valdeazores, y se hace tan imponente, que invita al baño. Seguimos el descenso y bordeamos una acequia que atraviesa el interior de una montaña. Entramos en el túnel que aparece en la última fotografía, y al salir encontramos paisajes dignos de los programas de F. Rodríguez de la Fuente. Aguilas en las cumbres y muflones por los peñascos.
Nos bañamos en una poza de agua fría incluso en estos días, y las cabras vienen para que les demos comida. Las última fotos son el final de trayecto de la Cerrada de Elías hasta el río Borusa.
Vistas del Hospital de Santiago, interiores y exterior, en un estilo claramente renacentista que nos transporta al siglo XVI.
Y a continuación la basílica menor de Santa María, edificada donde estuvo la mezquita, sobre la planta de la misma como en tantos lugares de la Reconquista. Es una combinación que incluye los sucesivos estilos arquitectónicos: desde el gótico, pasando por el barroco, al neoclásico. El interior tiene algunos elementos de gran valor, como la cúpula que contrasta con la sobriedad gótica de la nave central y laterales. Las verjas de algunas capillas tienen un valor excepcional.
Cuatro fotografías del Instituto y el Aula donde ganó su destino con la cátedra de Gramática francesa Antonio Machado en Baeza. Por aquí anduvo impartiendo docencia entre 1912 y 1919. Ya había estado en Soria, interiorizando sus Campos de Castilla, este gran discípulo de la Institución libre de Enseñanza que suspendía en el colegio latín y castellano. Nuestro gran poeta del "mañana efímero" donde describe "la España de charanga y pandereta, cerrado y sacristía, devota de Frascuelo y de María, de espíritu burlón y de alma quieta, ha de tener su mármol y su día, su infalible mañana y su poeta..." Amigo de todos los grandes como Juan Ramón, Lorca, Unamuno etc. y discípulo de Giner de los Ríos. Le habían dicho que fuera al teatro para ver el "genio alegre" y así lo hizo, pero no encontró toda la gracia de Andalucía que esperaba.
Su infancia son recuerdos de un patio de Sevilla...
En las sierras de Cazorla y Segura se contemplan estampas como las que describió Antonio Machado, y en lugar de poner fotos voy a transcribir fragmentos de aquel poema suyo: "Olivares y olivares de loma en loma prendidos cual bordados alamares... Venga Dios a los hogares y a las almas de esta tierra de olivares y olivares".
Pero además, uno se puede internar hacia el Puente de las Herrerías para acercarse al nacimiento del Guadalquivir (segunda foto).
También puede acercarse al embalse del Tranco de unos 15km de largo, y desde el Hotel Paraíso tomar una canoa y dar un paseo por 6 euros (fotos ss. una desde el mirador Rodríguez de la Fuente).
Y para volver hacia Villanueva del Arzobispo, se puede detener en el Charco del aceite y contemplar un Guadalquivir creciendo (son las últimas fotos)
Antes de concluir los encierros de este 2015, hay algunas imágenes que siempre vale la pena reivindicar. Estos mozos con su pañuelo recuerdan aquel romancero: y en la fiesta corriendo van los mozos, esquivando la muerte a sus antojos, y reviven las fechas y los nombres, y la sangre de dioses y de hombres... cuerda y loca bajo pañuelos rojos.